Parquet Pegado

Parquet es un galicismo que describe los largos cuadrados en diagonal que fueron usados en el Palacio de Versalles en 1684, como parquet de menuiserie («entarimado en madera»), para reemplazar el piso de mármol que era bastante tedioso de conservar.

Hoy día se suele utilizar el término para describir el suelo a base de tablillas de madera que han de ser pegadas una por una a una solera sólida y nivelada. Posteriormente se lija o “acuchilla” y se le da el acabado de aceite o barniz deseado. Tiene un tiempo máximo de uso aproximado de 50 años.

El formato de las tablillas varía desde 10 a 17 mm de espesor, de 250 a 450 mm de largo y de 50 a 70 mm de ancho.

La disposición de las tablillas al instalarlas nos dará distintos dibujos de figuras geométricas y angulares.

Las maderas más utilizadas son roble, jatoba, merbau, sucupira, cerezo, elondo.

El parquet industrial está formado por tablillas de madera maciza, de roble y eucalipto fundamentalmente, que se encolan a la solería de canto, dando una gran resistencia, dureza y estabilidad.

Se ha venido utilizando principalmente en  instalaciones deportivas y centros públicos, pero se instala cada día más en viviendas por su carácter innovador y sus grandes posibilidades decorativas.